jueves, 26 de abril de 2012

Pesadilla

Me senté en el sillón y en la mesita a su lado apoyé unos librosque llevaba conmigo. Sobé mi gran bigote y comencé a hablar: -Bueno, volviendo al tema que planteabas, es muy interesante tu planteo por cierto, me recuerda en cierto punto a la obra de Ramón Bartalak, un pensador húngaro, quién, en la que es quizás su obra máxima, LA PERPETUA MEDITACIÓN HACIA LA NADA, planteaba en una muy interesante relectura de filósofos tan dispares como Marcel Maearceau en LA MÍMICA DE LO COTIDIANO, o del jóven Rubí Shablón en BOMBAS CAEN SOBRE LAS IMPRENTAS, menciona algo así como que el ocaso del mañana no es otra cosa que el anteceder del día que aún no ha comenzado... (y seguí hablando esnobeadas por un rato largo, jactándome de mi caudal intelectual y capacidad de citar gente).

llamado a la solidaridad, si por alguna razón, llego a convertirme en alguién así, mátenme. En serio, acribillenme sin piedad. Se los voy a agradecer.

1 comentario:

José Gabriel dijo...

yo no te voy a matar , pero te llevo a la cancha a comer un chori y despues a ver a corre guachin al fantastico asi te enbruteces un poquito